Margarita Cabrer Esteban, vicepresidenta del círculo de los Amigos de la Maternidad y de la Vida AMAVI, escribió un libro impactante en donde cuenta crudamente la realidad del aborto en España He estado en el infierno
. En esta entrevista nos habla de los motivos que le llevaron a escribirlo y de la asociación en la que milita con entusiasmo tratando de evitar que las madres aborten, lo que se conoce como rescate. Acompáñenos a este viaje espeluznante al infierno del aborto.
Usted ha estado en el infierno, ¿A qué infierno se refiere?
Imagino el infierno como un lugar sin esperanza; donde las personas con las que te relacionas carecen de toda empatía. Ni siquiera piensas cómo salir de allí porque crees que esa situación es para la eternidad. Esta clase de estado de ánimo es el que he encontrado en las madres que se están planteando un aborto y el que pasó por mi cabeza en un momento determinado de mi vida.
¿Por qué la necesidad de escribir un libro sobre ello?
El libro se escribió sólo puesto que son las recopilaciones de los pensamientos, las frustraciones, las traiciones de la gente a la que recurres para pedir ayuda. Cuando volvía de la puerta del abortorio cada lunes y cada martes después de ver como 20, 30 madres o incluso 50 habían entrado para abortar en apenas dos o tres horas me quedaba llorando en el coche en el garaje de mi casa y cuando subía a casa tenía la necesidad de gritar a través de la ventana que me proporcionan las redes sociales.
¿Es el aborto un crimen perfecto?
En estos años acudiendo a los tribunales a defenderme de las injurias y mentiras de las que se me ha acusado me he dado cuenta del nivel de sometimiento de nuestros jueces. Han sido muchos (jueces y abogados y fiscales) los que sin poder mirarme a los ojos directamente han dictaminado que “yo me lo he buscado”. “Que para evitar que me peguen debería plantearme dejar de ir a hacer los rescates” “que mi forma de ser y de hablar tan clara y retadora provoca a los hombres”. He oído cosas que parecerían dichas en países sin Constitución garante de los Derechos Humanos. Por eso digo que si la víctima o quien la defiende es catalogada de acusada; el delito es perfecto.
¿Cómo nace AMAVI?
AMAVI nace por las mentiras y traiciones de las asociaciones provida, que se han auto elegido portavoces y capitaneado esta lucha plegándose a las órdenes del partido en el poder y aceptando bajar el perfil a cambio de dinero para sus asociaciones. No nos supone ningún beneficio personal haber constituido una asociación (y sí mucho papeleo) porque nadie de nuestra asociación cobra sueldo, los coches usados para los desplazamientos en los que ayudamos a las madres son los nuestros particulares, los teléfonos de la asociación son los particulares de cada uno de sus miembros. Nos sentimos unidas por sus siglas y lo que estas quieren decir: somos el círculo de los Amigos de la Maternidad y de la Vida. Nos unimos para ayudar a la madre que se ve sola ante un embarazo. Ayudamos a salir adelante y a dar esperanzas a esa mujer a la que todos han dado la espalda. Constatamos con respeto que TODAS las madres conlas que hemos hablado, incluso las que han abortado al final querían haber tenido a sus hijos. A estas últimas la presión les ha vencido.
¿Cuáles han sido los principales frutos de este apostolado?
Espero que la sola presencia durante tantos años ofreciendo ayuda ante la puerta del abortorio haya servido para hacer pensar a la gente que no es normal matar a quien nos estorba. Pero sobre todo creo que las pocas palabras que cruzamos con ellas (las madres que entran a abortar) están dichas con tanto cariño y a la vez con tanto dolor que han de perdurar en la mente de estas personas para cuando reflexionen y se den cuenta de su error. Entonces recordar lo que les dijimos les puede evitar un suicidio o les puede llevar a buscar ayuda psicológica.
El síndrome post aborto es la segunda parte del aborto. También tratamos con estas heridas porque aquí la mujer sigue estando abandonada de los profesionales sanitarios. El mismo psiquiatra que le firmo la autorización para abortar por estrés le negará que tiene una depresión postaborto. Espero también que nuestra determinación defendiendo la vida aún contra nuestros propios intereses legítimos haya hecho recapacitar a quienes deberían haber sido los que defendieran a estas personas: asistentes sociales, médicos, sacerdotes…que se han puesto de perfil ante su sufrimiento.
El aborto es esa finísima línea roja que ninguna persona ni sociedad debiera atravesar nunca….
Nos avisa de que estamos cayendo por la pendiente y debiéramos frenar antes de que la inercia sea imparable y nos autodestruyamos. Como decía Santa Teresa de Calcuta: “Si el aborto no está mal; entonces nada está mal”. Nos conviene como sociedad y como personas involucrarnos en la defensa del más indefenso de los seres humanos (el bebé no nacido) porque al final la sociedad que construimos o nos destruirá o nos permitirá vivir en ella. Yo creo que se puede y se debe colaborar desde la marginalidad.
El aborto es hoy en día un gran negocio tanto para los detractores como para sus defensores. Por eso no tiene sentido pagar una cuota a una asociación provida y después no hacer nada más. Vale más dedicarse a comentar en los periódicos digitales a favor de la vida. No tiene sentido acudir a una manifestación multitudinaria en Madrid gastándose mucho dinero en el viaje cuando allí se da pábulo y micrófono a quienes diferencian entre aborto bueno por supuestos y aborto malo por edades gestacionales.
¿Cómo se puede colaborar con ustedes?
Círculo AMAVI mantiene un local abierto al lado del abortorio de Badajoz donde las madres pueden descansar hablar y reflexionar. Sería un gran logro que en todas las ciudades donde hay abortorios se abriera un espacio semejante. Hemos rescatado a muchos niños allí.
Tenemos un número de cuenta abierto para poder pagar el alquiler de este faro que permanece día y noche con la luz encendida. Pero el dinero no ha sido nunca la verdadera necesidad. Hay que comprometerse con la vida. No con una asociación ni con un partido, ni con una cara sino con la defensa de la vida humana desde su inicio en la concepción hasta el final en una muerte natural. Información y contacto: 610872017
Javier Navascués